El lenguaje sexista
El lenguaje es totalmente sexista,
en especial el vocabulario más
coloquial, pero es un hecho al que todas las personas mujeres y hombres nos
hemos acostumbrado y no deberíamos permitir que ocurriera.
Ni que decir tiene que esto no es culpa ni de los hombres ni
de las mujeres, aunque creo que sobre todo las mujeres que de verdad somos
capaces de observar lo machista que es nuestro vocabulario deberíamos dejar de tomarlo como una costumbre y
reaccionar al lo que la sociedad nos impone. Como es posible que en pleno siglo
XXI siga habiendo una grieta enorme entre mujeres y hombres que demuestra que
aunque por ley tengamos los mimos derechos en la vida cotidiana no es así, y se
debe en gran parte a que hoy en día las
mujeres seguimos permitiéndolo.
Como ejemplos del lenguaje sexista se podría comenzar
hablando de lo que prácticamente todo el mundo llama “la intuición femenina”,
esta expresión proviene de la época en la que las mujeres eran tratadas como
personas que no pensaban, que no tenían uso de la razón y por eso cuando decían
algo acertado se le llamaba intuición femenina por no reconocer que somos
iguales y que somos inteligentes.
No hay que irse muy lejos para escuchar en un colegio, como
a una persona le dicen que es un “gallina” cuando quieren decirle que es un
acobardado y débil, y escuchar como a otro le
dicen que es muy “gallito” queriendo decir que es muy valiente.
Expresiones tan coloquiales como “del carajo” cuando
queremos expresar algo genial, y “putada” cuando algo ha salido mal.
Si buscas en un diccionario el significado de hombre
público, la definición será: hombre dedicado a la política, sin embargo si buscas
mujer pública, el significado es prostituta. Y ejemplos como estos hay cientos
en nuestras sociedades, y vienen dadas desde principios de la historia hasta
hoy en día.
Es algo que hemos aceptado todos, y que por alguna
razón siguen siendo utilizadas, porque
todavía no hay suficientes personas en este mundo que estén dispuestas a
intentar a erradicar el vocabulario
sexista.
ISABEL FERNÁNDEZ PEDROTE
No hay comentarios:
Publicar un comentario